La formación cree que las últimas informaciones dejan clara la poca
idoneidad de los terrenos y, por lo tanto, pone en entredicho la seguridad.
Además esperan que el gobierno estudie un calendario de cierre de las centrales
nucleares.
Izquierda Unida en la provincia de Cuenca ha pedido que se revoque, de manera
inmediata, la decisión del gobierno de instalar el basurero nuclear en la
localidad conquense de Villar de Cañas. Ý hace esta petición basándose en
las últimas informaciones aparecidas en
la prensa provincial que vienen a dejar claro que, al menos, no se tiene la
máxima certeza de que sea el lugar idóneo. Esta cuestión, tratándose de una
instalación que si fallara podría ser letal para los conquenses de hoy y de mañana, no es baladí.
De esta manera se da la razón a
los que vienen defendiendo la no instalación del nicho nuclear y, además, queda
claro que la elección de la zona no viene precedida de ningún tipo de estudio,
sino que es una decisión política del Partido Popular a nivel nacional y
regional. Por lo tanto, parece claro que la seguridad no ha sido la principal
preocupación.
Además, desde Izquierda Unida
esperan no sólo que no se construya el cementerio nuclear en Villar de Cañas,
sino que el gobierno, tras la revocación de la designación del municipio
conquense, abra un periodo de reflexión donde cuente con los movimientos
ecologistas para aprobar un calendario de cierre de las centrales nucleares de
España y, tras esta decisión, resolver con certeza y acierto el problema de los
residuos nucleares ya creados.
Por último, la formación ha
recordado que la contestación social es imprescindible y que el sentir
mayoritario de la población conquense está contra el ATC. Así, ha querido
destacar que el ATC está cada vez más lejos gracias a las muestras de rechazo
de la ciudadanía, a lo que se debe añadir, como destacan desde la Plataforma
contra el ATC, la esperanza de la anulación del proceso en vía judicial.
Además, desde IU han señalado que todo parece indicar que el ATC no comenzará a
construirse antes del 2015 y, por lo tanto, se ratifican en su posición
contraria y asegura la importancia que darán a esta cuestión las personas
